sábado, 16 de mayo de 2009

Las bibliotecas Populares

Son bibliotecas públicas abiertas a toda la comunidad, pero que no dependen de entidades estatales.

La expresión "popular" no refiere a un origen social, por ejemplo, obrero, sino que significa "biblioteca para todos".

Se trata de Asociaciones Civiles Autónomas, dirigidas por una Comisión Directiva, y sus miembros se eligen por votación de los socios activos. Para lograr un funcionamiento óptimo, cobran una módica cuota social a aquellos que requieren sus servicios, sin embargo, si no pueden pagar por los mismos, se les permite consultar el material en sala y fotocopiar mediante la entrega momentánea de us documento de identidad. También, suelen recibir subsidios de la CONABIP.

La finalidad de estas bibliotecas es la de suministrar servicios, brindar información y promover la educación mediante una colección documental bibliográfica y multimedial de calidad.

El acceso a la colección es gratuito, mientras la consulta sea en sala. Para retirar material a domicilio, es necesario que las personas se asocien, para lo cual se les pide unos minimos requisistos y aceptar el pago de una pequeña cuota.

Estas bibliotecas están orientadas a lograr que la información llegue al público destinatario, para lo cual están informadas de las necesidades de la población a la que sirven.

Como dice la CONABIP, "las bibliotecas populares son instituciones de carácter educativo cultural que, en forma amplia, libre y pluralistas ofrecen servicios y espacios para la consulta documental, la expresión y el desarrollo de actividades culturales, de extensión bibliotecaria y de promoción de la lectura".

Para garantizar este objetivo la CONABIP colabora con ellas mediante la provisión de diversos materiales como libros, videos, software educativo, etc.

Las ayuda a informatizarse mediante la provisión de PC, conectividad a Internet, bonificación telefónica, distribución gratuita del software SIGEBI, etc. Además, suele donar Bibliomóviles e incluso Bibliolanchas equipados con recursos bibliográficos, informáticos, TV, reproductor de video, etc., para actividades culturales y de extensión bibliotecaria.

Es por ese motivo, que vale la pena contribuir con las bibliotecas populares, convirtiéndose en socios, para garantizar su funcionamiento, y donando, si es posible, todo aquel material que uno ya no necesita pero que resulta útil para muchas otras personas.
Fuente: CONABIP

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